URUGUAY – El auge imparable de las Tecnologías de la Información (TI) en Uruguay ha trascendido fronteras, consolidándose como un pilar fundamental en el entramado económico del país. Con una facturación que superó los US$ 2.840 millones en el año 2022 y exportaciones que alcanzaron los US$ 1.816 millones, este sector no solo ha demostrado un crecimiento constante, sino que también se posiciona como uno de los principales generadores de empleo, con más de 22.000 puestos directos y un salario promedio de $91.000.
El panorama económico uruguayo ha sido testigo del crecimiento exponencial de las Tecnologías de la Información, que se posicionan en el quinto puesto del ranking de exportaciones del 2022, siguiendo de cerca a industrias tradicionales como la cárnica, la forestal, la soja y el turismo. Con una participación significativa del 9,3%, este sector se ha convertido en un motor vital de la economía nacional.
Sin embargo, este crecimiento no está exento de desafíos. La escasez de talento en el ámbito de las TI ha sido un obstáculo constante para el desarrollo sostenido del sector. El modelo de “software factories” se enfrenta a limitaciones para mantener su ritmo de crecimiento, lo que resalta la urgencia de adoptar estrategias para potenciar el talento local y atraer inversión extranjera en capacitación y desarrollo tecnológico.
A pesar de estos desafíos, el potencial de Uruguay en el campo de las Tecnologías de la Información es innegable. Con un mercado que tiene el potencial de duplicarse cada década, se abren oportunidades para la creación de empleos de alta calidad y el impulso de la innovación en una variedad de sectores económicos.
Para consolidar aún más la posición de Uruguay en el mercado de las TI, es fundamental adoptar políticas que fomenten la formación y capacitación de profesionales en este campo, así como promover la colaboración entre el sector público y privado para impulsar la investigación y el desarrollo tecnológico.
Las Tecnologías de la Información han emergido como un pilar fundamental en la economía uruguaya, generando empleo, impulsando la productividad y posicionando al país en el escenario global de la innovación tecnológica. Sin embargo, para aprovechar plenamente su potencial, es necesario abordar los desafíos existentes y trabajar en conjunto para seguir avanzando en este camino de crecimiento y desarrollo.
